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COYOTAS

Antecedente de los dulces y postres en México

Una añeja costumbre dulce envuelve nuestro querido México desde tiempos prehispánicos, los indígenas mesoamericanos preparaban dulces con frutas de la región, semillas, diversas especias y miel; a la llegada de los españoles con nuevos ingredientes, se sincretizaron las culturas culinarias y en los conventos mexicanos de los siglos XVI y XVII fue donde se empezaron a mezclar los componentes y tradiciones, para dar paso a ciertas preparaciones dulces que se degustaban antes de la comida, de manera peculiar les llamaron “Ante”. Al pasar el tiempo, en la segunda mitad del siglo XIX se cambió la tradición y se servían después de la comida, un postre rico caía muy bien, terminando el momento con una sensación de alegría.

Permíteme comentarte, curiosa del “Ante”, empecé a investigar y me encontré que algunos textos hablan del Manjar Real oaxaqueño, señalado como una variedad muy antigua de Ante y casi desaparecida; se cocinaba en los conventos con pechugas de pollo molido, se les agregaban marquesotes empapados con almíbar y canela molida, era costumbre de viernes prepararlos sin pollo. 

Me nacieron tantos deseos de probarlo que decidí darme una vuelta por el mercado y puestos de dulces, pues nunca había escuchado de ellos, efectivamente no los conocen y dicen saber nada de aquel postre tan especial, desafortunadamente me quedé con las ganas.

Si alguien tuviera “otros datos”, por favor compártanlos por aquí. 

Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad

Hoy México es glorioso por su gastronomía, incluidos por supuesto, los postres y dulces típicos regionales con una amplia gama de sabores, aromas y formas, por tanto, el 16 de noviembre del año 2010, fue reconocida como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.

Para que conozcas algo de los exquisitos dulces mexicanos, te relato sobre los siguientes:

Coyotas

Este dulce es típico de Sonora, México, desde finales del siglo XIX. Se elabora con harina de trigo, manteca vegetal, leche, azúcar y con relleno de piloncillo, su tamaño es entre los 10 y 15 cm. 

Se dice que la primera persona que lo preparó las presentó hacia finales del siglo XIX, en la ciudad de Hermosillo de este mismo estado, lo nombraron Coyota, por el valor de su significado “hija de india y español” y tuvo gran éxito por su especial sabor, los descendientes, decidieron continuar la tradición y empezaron a exportarlo a Arizona en los Estados Unidos. 

Al ser un dulce tan prometedor, varias empresas mexicanas tomaron la receta, le hicieron modificaciones en su contenido, incluyéndoles jamoncillo de nuez, cajeta, jamoncillo o guayaba, algunas otras compañías, decidieron llevarla a otro nivel comercial, logrando su distribución a nivel nacional e internacional ¡Todo un éxito! Si vas a Sonora no dejes de probarlo.

GALLITOS DE PEPITA

Son propios del Municipio de Texmelucan, Puebla, es una rica tradición heredada de generación en generación, desde el año de 1950, actualmente son alrededor de 30 familias comprometidas con su elaboración, los hacen de masa de pepita de calabaza con la figura de gallitos, su tamaño puede ser de 2 hasta los 20 cm, adornados con tiras de papel de china o crepé, se acostumbran para los altares y ofrendas que se exponen en los hogares de la región, durante la temporada de todos santos.

Esta curiosidad de dulce, tiene un proceso largo y minucioso, ya que la pepita de calabaza se debe limpiar con ayuda de la ceniza de carbón para quitarles el pellejito, lo que permite retirar dos capas que evitan que la masa amargue, se requieren 15 días para que queden listas, posteriormente, se amasa con miel de azúcar durante tres horas, entonces, se inicia manualmente la escultura de los gallitos, se pintan con colorantes y se adornan con lentejuela negra, laminillas doradas y las tiras de papel crepé o de china.

El tratamiento empieza el 15 de octubre de cada año y deberá estar concluido para el día 24, las personas dedicadas y muy trabajadoras han logrado elaborar 20 mil gallitos durante la temporada, se distribuyen para la vendimia de casa en casa, afuera del mercado municipal Domingo Arenas y en las calles de las comunidades de San Jerónimo Tianguismanalco, Santa María Moyotzingo y San Martín Texmelucan. 

No dejes de llevarlos si andas por este hermoso lugar.

NENGUANITOS

De nombre singular, es un dulce artesanal de Oaxaca muy popular en mercados y puestos de la calle. Está elaborado con harina de trigo, levadura, agua, manteca de cerdo y bicarbonato de sodio. Se hornea hasta que se dora y luego se fríe en manteca de cerdo junto a miel de azúcar y agua; y dicen que el tiempo de la cocción, lo miden por credos. 

Da la apariencia de una torre de monedas. Realmente son riquísimos y si estás por la Plaza de las Nieves, a un lado de la Iglesia de la Soledad, no dejes de probarlos acompañados de una deliciosa nieve de leche quemada.

Visita Oaxaca, un estado con cultura, patrimonio, arte y tradiciones