¿Y tú? ¿te has perdido el placer de disfrutar este exquisito platillo?
Según he leído, tiene una historia de más de un siglo y al parecer surge por accidente, les cuento…
Cuando una monja clarisa, ya muy anciana y de muy poco oír, agregó ingredientes que creyó escuchar cuando le encargaban el platillo de mole, al estar listo para ser degustado por la abadesa del convento poblano, quien estaba muy renuente de probarlo ¡oh, sorpresa! le resultó tan agradable la sensación que le provocaron los aromas y los tonos dulces del plátano, la manzana, la pera, la piña en combinación con el picor de los chiles y la profundidad de las especies, que comió apresuradamente y manchó el mantel, le fascinó, por lo que repitió el platillo, saltándose las reglas de moderación. De ahí surge el singular nombre de “manchamanteles”.
A partir de ese momento, el manchamanteles formó parte de la gastronomía mexicana, la receta pasó de convento en convento, al recetario de la Décima Musa, Sor Juana Inés de la Cruz; al de Dominga de Guzmán, del siglo XVIII, y al libro de fray Gerónimo de San Pelayo.
Estados donde es tradición el manchamanteles
La tradición tomó fuerza en diversos estados de la República, tomándose como plato principal de celebraciones especiales o guateques, cada estado, hizo pequeños cambios para recrear su propia identidad, lo acompañaron con carne de cerdo, pollo o guajolote.
En la ciudad de Puebla, es una receta absolutamente barroca que siguió la tradición conventual. Los ingredientes son además de los chiles: clavo, comino, ajonjolí, canela, pera, manzana y plátano macho y, en ocasiones, el camote.
En Oaxaca, con una tradición gastronómica importante, aprovecharon los aromas de los chiles endémicos, por lo que el dulzor se complementó con toques ahumados que aportó, por ejemplo, el chile pasilla mixe.
En la Ciudad de México, es típico durante los jueves de Corpus Christi, una fiesta que se festeja cinco semanas después de la Pascua, lo cocinan con jícama y con pocas especies.
En Guerrero y Jalisco, aunque de preparación muy distinta, en el primero se agregan jitomates asados y en el segundo, chiles en vinagre.
Si te decides, puedes preparar en casa el especial manchamanteles, pero eso sí, requiere de paciencia y esmero. Para disfrutarlo al máximo, adórnalo con unas rebanadas de plátano macho o manzana, agrega a un lado arroz blanco y acompáñalo con deliciosas tortillas, hechas a mano.
Te dejo por aquí la receta para que un día especial te animes a prepararlo y sorprendas a tus familiares y amigos, si te es posible, invítame a saborearlo.
Manchamanteles poblano
Ingredientes
Procedimiento
Fuentes
Cynthia Fábila. Desde la Fe. Noticias. Iglesia en México. La receta del manchamanteles surgió por una discapacidad. 13 de septiembre, 2019. Consultado el 26 de mayo de 2022. Disponible en: https://desdelafe.mx/noticias/iglesia-en-mexico/la-receta-del-manchamanteles-surgio-por-una-discapacidad/
Animal Gourmet. Recetas. Manchamanteles, el mole dulce de la cocina mexicana. Consultado el 26 de mayo de 2022. Disponible en: https://www.animalgourmet.com/2021/08/04/manchamanteles-mole-dulce-cocina-mexicana/